En el mes de enero de 2021 falleció en Libreville, Gabón, a la edad de más de 80 años, la famosa curandera Bernadette Rebiénot (Gabon: Décès d’une figure de la médecine traditionnelle).
Hace 20 años tuve la oportunidad de ser iniciado por ella en el ritual de Bwiti en su Centro Oyenano, gracias a la intermediación de mi amigo el Dr. Alain le Vigouroux, entonces asesor médico del gobierno de Gabón. Esta extraordinaria experiencia de 5 días bajo los efectos de la Iboga o bois-sacré (madera sagrada), equivalente africana de la Ayahuasca amazónica, marcó profundamente mi recorrido. El vínculo que se establece en este contexto es casi filial.
Bernadette Rebiénot, redonda y poderosa al mismo tiempo, inspiraba respeto, confianza y ternura. Ella se entregaba con compasión a las personas que iniciaba y curaba, gaboneses o extranjeros, hombres o mujeres, ricos o pobres.
Impregnada de sabiduría ancestral, mantuvo una gran sencillez, una agradable empatía, una especie de natural seguridad en sí misma. Por su gran corazón, su generosa feminidad, su espontaneidad casi ingenua por momentos, era al mismo tiempo la niña, la hermana, la madre, la abuela. Una excepcional muestra de humanidad.En 2001, invitamos a Bernadette a participar en un encuentro internacional de curanderos en Takiwasi, la única representante africana entre 40 chamanes amazónicos, y aquí se atrevió a tomar Ayahuasca. La prensa gabonesa se hizo eco de esta aventura (Une guérisseuse gabonaise chez les chamans de l'Amazonie). Una película muy hermosa que narra este encuentro extraordinario fue producida en Takiwasi por Jean-Claude Cheyssial (El Espíritu de la Ayahuasca), el mismo que realizó también un resumen de la visita de Bernadette a Perú (Une guérisseuse africaine au Pérou).
Bernadette era profesora, cristiana, y se encontró ser heredera del poder curativo de un antepasado después de sufrir una enfermedad que solo la iniciación en el Bwiti pudo resolver. Luego se convirtió en una referencia en Gabón por las tradiciones del Bwiti y también en una figura internacional, representante de las medicinas tradicionales y los conocimientos ancestrales. Esto la llevó a formar parte del Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas creado en 2004 en New York con el objetivo de reunirse cada año en el hogar de una de ellas para discutir sobre medicinas tradicionales. El decimotercer y último encuentro tuvo lugar en 2015 en el hogar de Bernadette en Gabón, y este evento fue relatado por su amigo Jean-Claude Cheyssial en la película "Le Dernier Conseil" (El Último Consejo) que es también su último retrato.
En un afectuoso homenaje que le rinde Jean-Claude Cheyssial (Hommage à Bernadette Rebiénot), ella explica que durante los trances está habitada por su antepasado y es él quien sana a través de ella y ella confiesa que "le molesta" perder el control de sí misma en ese momento.
Esta contradicción, que no pudo resolverse del todo en Bernadette, la llevó a separar su "religión", como ella la llama, de su práctica terapéutica, como dos caminos paralelos que no se encuentran. Aquí reside el gran desafío de las medicinas ancestrales, que es conciliar la espiritualidad de su propia tradición con el cristianismo (en su esencia, su mística, sus orígenes...).Este tema se aborda en el libro del sacerdote gabonés Noël Ngwa Nguema sobre el Bwiti: "Rites Initiatiques Gabonais à la rencontre de l’Evangile" (Ritos gaboneses de iniciación al encuentro del evangelio), que muestra la ambigüedad de las relaciones entre la cultura ancestral y el cristianismo, tanto entre los iniciados en Bwiti como entre los sacerdotes católicos. Este asunto ha sido retomado recientemente, después de la muerte del padre Noël, con una reflexión de Simon-Pierre E. Mvone Ndong sobre "Le débat sur l'inculturation et sur la nouvelle évangélisation du Gabon, 20 ans après" (El debate sobre la inculturación y la nueva evangelización de Gabón, 20 años después). Hemos realizado un breve análisis de este opúsculo (en francés) con algunas reflexiones que nos suscita. A continuación, compartimos una conclusión de este modesto estudio:
"Este hiato entre la tradición y el cristianismo nos parece que sólo se puede llenar estableciendo ‘puentes’ entre las experiencias iniciáticas ancestrales y las del camino cristiano. Este camino cristiano puede y debe beneficiarse del estudio de los textos para acercarse a las medicinas tradicionales, pero para que este estudio no se limite a la abstracción y la elaboración de hipótesis más o menos consistentes o imaginarias, debe apoyarse en los aportes de la clínica y confrontarla, es decir atravesar una doble experiencia, la de la iniciación tradicional por un lado y la de la práctica de liberación espiritual cristiana por otro".
Esperamos que Bernadette se encuentre ahora en el lugar de resolución de estas aparentes contradicciones, reconciliando su fe cristiana y su herencia ancestral.
Jacques Mabit